La paciencia

Ten paciencia con todas las cosas, pero sobre todo contigo mismo

San Francisco de Sales (Obispo y Doctor de la Iglesia)

Entramos en época de vacaciones, en este tiempo intentamos desconectar de todo el movimiento tanto interno como externo que hemos tenido durante todo el curso. Este puede ser un buen momento para pararnos y reflexionar. Si se han realizado varios tratamientos de fertilidad puede ser el momento de parar y reflexionar, de darnos cuenta de lo importante que puede ser tener paciencia con nosotros mismos y que esto nos ayude a recoger fuerzas para seguir intentando nuevos caminos.
A veces el dejar pasar un tiempo puede ayudar a ver la situación vivida desde otra perspectiva. Meternos en una espiral de intentarlo una y otra vez pase lo que pase nos puede llevar a tener un gran desgaste emocional.
Tener paciencia con uno mismo y saber esperar a que llegue el momento adecuado para volverlo a intentar de nuevo, aunque pensemos que el tiempo corre en contra nuestra, puede ser la mejor manera de conseguir lo que deseamos.

La paciencia es aprender a esperar

Hoy puede ser un gran día

“Hoy puede ser un gran día, date una oportunidad”

Joan Manuel Serrat

Poder plantearnos un tratamiento en el día a día, celebrando los avances sin estar pendiente del día siguiente es una oportunidad y un reto para uno mismo, porque podemos vivir el presente, el mañana ninguno de nosotros lo puede saber. Podemos apostar porque en la siguiente visita habrá buenas noticias pero sin olvidarnos de valorar el presente, lo que tenemos hoy.

Ya esta aquí el verano

Hoy ha empezado el verano desde el punto de vista meteorológico, así que el calor que hemos sufrido hasta ahora no cuenta. A partir de hoy empieza lo bueno y ya nos podemos quejar del calor que hace.

Ánimo que siempre nos quedará la playa, la piscina o las fuentes para refrescarnos un poquito.

Compartir es necesario

"La soledad se admira y desea cuando no se sufre, pero la necesidad humana de compartir cosas es evidente."

Carmen Martín Gaite

A veces nos podemos cuestionar si compartir o no lo que estamos viviendo: ¿que pensarán mis amigos?, y la familia ¿como reaccionará?, ¿me entenderán?. Cuestiones como éstas nos pueden llegar a levantar un muro de dudas que nos impida compartirlo. Si decidimos romper ese muro probablemente veremos el problema de otra manera y mucho más llevadero, nos dará más fuerza para superar las dificultades del camino. Compartir es expresar lo que llevamos dentro con la necesidad de poder ser entendidos y aceptados.

Compartir es expresar

Darle la vida por segunda vez

En los tiempos que corren es difícil encontrar buenas noticias en la prensa, parece que los diarios se hayan vuelto periódicos de malas noticias, todo es un desastre, todo va mal y además irá a peor. Pero aveces parece que pueden surgir noticias que pueden ser publicadas en los periódicos de buenas noticias, aquellos en los que sólo se hable de cosas buenas y positivas.

Todo esto viene a colación por la noticia que se conocía hoy del trasplante de un trozo de hígado de una mujer a su hija de 8 meses. Eva, que así se llama la niña, tenía un tumor hepático bastante grande y necesitaba un trasplante con urgencia. Se optó por el trasplante de donante vivo y después de numerosas pruebas se determinó que la madre era compatible con la niña. Así, el pasado 3 de junio en el Hospital La Fe de Valencia y tras 10 horas de ciugía se le traplantó a Eva un trozo del hígado de su madre María José. Parece ser que todo ha ido muy bien, a la madre ya se le ha dado de alta, y a la niña se le dará en breve.

¡Enhorabuena a todas las personas que han hecho esta buena noticia posible!

http://www.elpais.com/articulo/sociedad/bebe/cancer/higado/salva/vida/recibir/parte/organo/madre/elpepusoc/20090611elpepusoc_7/Tes

Mil razones para reir

“Cuando la vida te presente razones para llorar, demuéstrale que tienes mil y una razones para reir”.

Anonimo

¡Merece la pena hacer un cambio dentro de uno mismo y mirarse al espejo para decirse que adelante!, que hay otros caminos para seguir avanzando y otras soluciones. Mirarte al espejo y contestarse que si, que hay más razones para sonreir que para llorar, que llorar esta bien respetárselo, pero que después tiene que venir la sonrisa sobre todo de nuestro interior y esa nos ayudará a que salga hacia nuestro exterior.

Hay muchas razones para reir